Santiago del Estero, junio de 2025 – Con el anuncio oficial del regreso de las retenciones a productos agroexportables —exceptuando trigo y cebada—, se consolidó un escenario de alta preocupación en el sector agropecuario. Durante una entrevista reciente, el dirigente rural Pablo Karnatz (CRA) analizó el impacto de esta medida y puso en evidencia la delicada situación económica, climática y productiva que atraviesan muchas regiones del país.

“La esperanza es lo último que se pierde”, dijo, en referencia a las declaraciones que hasta último momento dejaban abierta la posibilidad de una prórroga del alivio impositivo. Finalmente, el Gobierno confirmó su decisión de restablecer las retenciones al maíz y la soja.

Entre los principales puntos que abordó Karnatz, se destacaron:

• 📉 Golpe a la rentabilidad regional: El referente subrayó que cerca del 70% de las divisas del país provenían del agro y que la suba de retenciones afectaría especialmente a las provincias alejadas de los puertos, donde los costos logísticos son más elevados.
• 🌱 Rindes comprometidos: Señaló que muchas zonas del norte argentino atravesaron severas dificultades climáticas, lo que redujo considerablemente los rendimientos. “Hoy, si no tenés un muy buen rinde, no hay ganancia”, advirtió.
• ⚖️ Cuestionamientos al esquema cambiario: Criticó el uso de “dólares prestados” para mantener artificialmente bajo el tipo de cambio, y pidió una política económica basada en producción real y acumulación genuina de reservas.
• 🧭 Reclamo de señales claras: Karnatz insistió en la necesidad de generar condiciones estables y predecibles para alentar la inversión y la siembra. “Además del número frío, hay que dar señales: si hay confianza, el productor siembra hasta debajo de la cama”, ironizó.
• 🏛️ Diálogo limitado con el gobierno: Si bien reconoció encuentros con funcionarios, cuestionó la falta de poder de decisión de muchos interlocutores. “Hacen falta reuniones periódicas con quienes realmente tienen la lapicera”, sostuvo.
• 🔮 Proyecciones hacia 2026: Alertó que la sostenibilidad del modelo actual dependerá de la capacidad de generar crecimiento genuino. Consideró que el segundo trimestre de 2026 será clave para evaluar si Argentina logra afianzar su matriz productiva o si sigue dependiendo de endeudamiento externo.