Visitamos en Estación La Punta, Choya, Santiago del Estero el Establecimiento La Guardia donde también funciona la Cabaña El Dino, cuyos propietarios son los miembros de la familia Audano Fernández. Ana María Fernández, Norberto y Leo Audano. El campo es de 5000 has, tiene 5 perforaciones de agua, todas entre los 60 y 100 mts. Con un caudal entre los 2000 y 5000 lts. Actualmente tiene 1200 animales propios y unos 1800 de terceros con un sistema de arrendamiento por pastaje.
“El campo fue adquirido por mi abuelo Dino en el año 1989. Nos cuenta Leo. En el 2010 nos inscribimos en la Asociación Brangus Argentina como Cabaña de reproductores de esa raza”.
“Tenemos animales de rodeo general mezclados con los identificados de la cabaña. O sea que no hacemos diferencia en la alimentación” nos destaca Leo, como marcando una diferencia.
En cuanto al manejo reproductivo del establecimiento nos dijo “El servicio lo comenzamos a fines de noviembre, a tiempo fijo y en diciembre con inseminaciones. Utilizamos el 1% de toros en diciembre y en enero desde un 3% hasta un 4% aproximadamente. En marzo se sacan de servicio los toros. Esto siempre depende de las lluvias. Si vinieron bien, cortamos el servicio en marzo. Si las lluvias se atrasaron, extendemos el servicio hasta fines de abril”, indicó Leo. “Los destetes de los terneros comienzan en marzo o abril, por tamaño, cuando tienen unos 200 kilos hasta mayo lo que sería la cola de parición”, finalizó.
Luego le preguntamos a Leo sobre el plan sanitario que utiliza y nos comentó “comienza con los terneros al pie de la madre con algunas vacunas, para evitar el estrés al destetar. Las segundas dosis se aplican al ternero ya destetado. Los toros, luego del servicio descansan uno o dos meses y les hacemos un raspaje para ver si están bien de trichomona, de campylobacter, y algunas enfermedades venéreas que traen problemas reproductivos. A las vacas y vaquillonas, siempre al iniciar el ciclo reproductivo, se le coloca una vacuna reproductiva. En el tacto, a las preñadas, también se las colocamos. Los animales secos, que no tienen cría al pie, se bañan con garrapaticidas, generalmente es todo lo que es invernada y recría. Hacemos tratamientos contra garrapatas intercalando distintos productos y tratamientos para evitar la resistencia a las mismas” expresó.
En cuanto a cómo se manejan con la alimentación nos dijo “la alimentación es todo con pasto. Verdes en verano y diferidas en invierno. Gatton Panic y Buffel Grass, el 50 % de cada uno. En invierno, cuando los pastos están secos, suplementamos con saleros de urea para mejorar la digestibilidad. A los terneros, en el primer año del destete, se los suplementa con 700 gr de harina y 500 gr de maíz. Con esto buscamos que ganen 500 o 600 gramos en su primer invierno. Para terminar un macho, lo hacemos en encierro de 30 a 40 días, con una dieta del 90 % de maíz entero y el resto de concentrado”. Indicó Leo.
Sobre los animales de la cabaña dijo “La selección de los animales de cabaña se hace a partir de los animales inscriptos. Usamos muchos toros que nadie conoce, y vamos probando en distintas vacas inscriptas. Esta selección es en parte a ojo y por los datos de cada animal, porque algunos tienen muchos datos, pero fenotípicamente no lo demuestran. Por ejemplo, este año destetamos un ternero que fenotípicamente no dice nada, pero es una sangre nueva ¾ que estamos por trabajarla en los próximos años.
Las inspecciones de la Brangus son periódicas, ahora tenemos un lote que hemos seleccionado y marcado con los RP correspondientes. Esta semana tenemos la visita del Dr. Pedro Marrupe que hará la inspección. Los que no pasen se separan” expresó.
En el campo vimos hermosos caballos criollos y le consultamos a Leo sobre ellos y nos dijo “Los caballos son muy necesarios para la ganadería, aquí recorremos muchos kilómetros con ellos. Creo que es imprescindible para los que tienen rodeo de cría. Nosotros criamos criollos que son muy fuertes y aptados a esta zona, sobre todo las pezuñas porque son fuertes y aguantan bien este tipo de suelo pedregoso. Hace un par de años que incorporamos tres yeguas puras y luego fuimos intercambiando los potros de distintas aras de caballos criollos”.
En el momento que estuvimos ahí vimos un camión cargando animales y le preguntamos sobre el estado de los caminos, a lo que respondió “los públicos son buenos, la mayoría de las veces nosotros les hacemos el mantenimiento porque vialidad lo hace una vez por año. Había tres partes donde se juntaba el agua y nosotros lo levantamos así que hoy no tenemos problema para el ingreso de camiones”.
Para finalizar hablamos sobre la situación actual de la ganadería y expresó “Nosotros nos adaptamos a las políticas del estado, por ejemplo, al cierre de exportaciones, pero ese tipo de medidas hace que suspendamos los planes de inversión o las acciones que teníamos planeadas hacer, precisamente para ver qué pasa y actuar en consecuencia, adaptándonos”. Finalizó.